Típicas vacaciones en el típico aeropuerto con los típicos problemas (II)

A las 11.30 estábamos a en el aeropuerto después de que un viejecito nos viera cara de tontas y nos caneara un euro por el morro.En fin, eso es otra historia, el caso es que llegamos con casi tres horas de antelación al aeropuerto internacional de Roma, que no es moco de pavo, que de allí salen vuelos trasanlánticos y eso, que no se quedan a la esquina. En fin, nos sentamos un ratito en unas sillas a hacer tiempo y al cabo de un rato bajamos a iniciar la cola de facturación. El caso es que a nuestras espaldas veíamos como varias personas iban dejando sus maletas arrinconadas en un lateral de la terminal, a lo que en principio no hicimos caso. Nuestra sorpresa fue cuando una vez en la cola de nuestro vuelo, la cual cambió en un par de ocasiones de situación, nos enteramos que a causa de un apagón eléctrico las cintas de facturación no funcionaban, y las maletas no podían ser facturadas ni enviadas al avión. Por favor, ya he dicho que es el aeropuerto de Roma no?? Coño, que se supone que allí va gente de todo el mundo, EEUU, México, Argentina, Europa....que no es que lleguen vuelos caseros que se llaman. En fin, allí dejamos nuestras maletas, después de el consiguiente cabreo y de que hicieramos un par de fotos como recuerdo de nuestras maletas, las cuales no sabíamos si volveríamos a ver. La cuestión es que subimos al avión sin saber dónde paraban nuestras maletas y nos tuvieron una hora en el interior del mismo a la espera de que cargaran las maletas que nunca fueron cargadas. A todo esto, MJ que minutos antes tenía un cabreo monumental, seguía cabeceando y dormitando sobre mi hombro a causa de las pastillas dopantes que se había tomado unos minutos antes. Cuando el capitán del avión informó de que las maletas no iban a poder ser enviadas con nosotras, lo cual comuniqué a MJ después de varios movimentos del hombro para que se despertara, las esperanzas de ver nuestras pertenencias de nuevo se fueron desvaneciendo.

Llegadas a Barcelona, empezó la odisea para realizar la correspondiente reclamación. Yo no sé cuánto tiempo hicimos de cola, pero el caso es que salimos del aeropuerto a las 9 de la noche, después de casi nueve horas de aeropuerto en aeropuerto, cabreadas y sin maleta.

Y cuál es el final a esta historia?? MJ ha recuperado su maleta, y la mía sigue a saber dónde. Si algún dia recupero mi maleta, ya os lo haré saber.

Pdta: Se nota que ya estoy en casa, que me he extendido más, pero claro en mi anterior post estaba disfrutando de una semana de perrería en el camping, y aproveché unos minutos que no había gente en los ordenadores del mismo, y que estos funcionaban, dos cosas que parece mentira que puedan ser a la vez.